La Lajmdcm La Sociedad Anónima (Corporación) de Delaware ha sido la forma más fuerte en organización de entidades en los Estados Unidos desde finales de los años 1800 cuando las entidades importantes, como los ferrocarriles, la Standard Oil y DuPont, vieron necesaria la organización en las estructuras organizativas que se destinarían a la gobernanza de la empresa, a medida que crecían más allá de la vida de sus fundadores famosos. La Corporación General está perfectamente diseñada como un vehículo para la incorporación al mundo empresarial, y también proporciona una manera de reunir capital, según sea necesario durante toda la vida de la empresa.
En su forma más simple, la Corporación General consta de tres niveles de poder; los accionistas, los directores y los oficiales. La Asamblea de Accionistas “ADUEÑAN” la empresa. Los directores “MANEJAN” la empresa y los oficiales”CORREN” la compañía día a día. Los Estatutos de la empresa establecen las facultades y los límites del poder en cada una de las gradas. Cada grupo puede tener prioridades distintas y podrian devatir de vez en cuando. Cuando uno sube de nivel en contra de los otros, una batalla de adquisición puede sobrevenir. Batallas de adquisición son habitualmente peleadas en la Corte de Delaware de la Cancillería. En esta corte de negocio único un solo juez decide el caso. No hay jurados, ni tribunales, ni 12 hombres en pugna. Un juez determina rápidamente qué parte deberá prevalecer de acuerdo a los 200 años de las leyes y los precedentes legales. Se dice que los Cancilleres Tribunales respetan las decisiones de buena fe de los administradores sobre las prioridades de beneficio de los accionistas, pero la mayoría de los accionistas en general, pueden elegir una nueva junta directiva, en caso de no agradarles la que actualmente tienen.
El “Reglamento” acerca de cómo estas tres categorías interactúan entre sí, está contenida en tres bases de conocimiento general. El “código”, que es la norma legal aprobada por la Legislatura del Estado, en este caso llamada “Ley General de Sociedades de Delaware” (DGCL), la “jurisprudencia” dictada por la Corte de Delaware de la Cancillería y el Tribunal Supremo de Delaware en los últimos 200 años y en las sentencias “Carta”, que son las decisiones judiciales individuales en una miríada de pequeños detalles que surgen en un caso judicial.
Los accionistas tienen concedidos dos “derechos” que los directores y administradores no reciben: El derecho a votar por La Junta Directiva, y el derecho a participar en los dividendos de la empresa en su parte proporcional cuando la Directiva declaró dividendos. Los accionistas, sin embargo, no pueden operar la empresa. Ellos no pueden intervenir de repente y empezar a decirle a la gente qué hacer. Ellos actúan en juntas, no en forma individual. (A menos que una persona es propietaria de más del 50% de la empresa. En ese caso se podría controlar toda la empresa y los tres niveles de poder.)
La Mesa Directiva también actúa en las reuniones. Directores no suelen actuar de forma individual. Las reuniones deben ser previamente anunciadas a todos los Directores y debe contener la mayoría de los consejeros presentes a ser una reunión legal. El Consejo de Administración toma todas las decisiones importantes en la empresa. Son responsables de la política de la empresa y supervisar a los administradores. Los directores de la compañía determinan lo qué se hará con sus beneficios y controlan la venta de acciones en la compañía. Contratan a la Mesa Directiva de la compañía para dirigir la empresa día a día.
Los oficiales trabajan a placer de la Mesa Directiva, o por contrato con la Junta. Los oficiales son por lo general el Presidente, Vicepresidente, Secretario y Tesorero, pero los estatutos de la empresa pueden preescribir cualquier tipo de funcionarios y títulos, responsabilidades y funciones. Los oficiales son responsables del comportamiento de la empresa y la rentabilidad. Si fracasan, podrian ser despedidos. Si tienen éxito, se convierten en superestrellas.
Esta estructura única, con tres niveles obligatorios de poder, merece un voto de confianza por el éxito de la revolución industrial americana, la economía estadounidense desde 1900 y todo el negocio de Wall Street. Esta estructura difiere de otras formas de organización de empresas como el único propietario o sociedad, que le preceden y la Sociedad de Responsabilidad Limitada que le siguió históricamente.
Si su visión es formar una gran empresa, como Apple o Google o Dell, no se podía elegir un mejor vehículo para tomar el paseo, que una Corporación General (sociedad anónima) de Delaware.
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